La ópera ‘Sansón y Dalila’, de Saint-Saëns, abre el Festival de Mérida con la Orquesta de Extremadura

“La cultura debe ser abierta, accesible, participativa e inclusiva, y el Festival de Mérida ha trabajado y trabaja para hacerlo posible”, así lo ha asegurado la secretaria general de Cultura, Miriam García Cabezas, durante la presentación de la obra ‘Sansón y Dalila’, que inaugurará mañana jueves la 65 edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida.

García Cabezas ha afirmado que la cultura es “el mejor escenario para el encuentro y para la igualdad”, y el Festival de Mérida “trabaja para hacerla accesible”, de hecho, “muchas de las funciones de esta edición serán accesibles para las personas con diversidad funcional sensorial, bien con bucles magnéticos, con audiodescripción en directo, o con subtítulos”.

La responsable de Cultura ha querido felicitar al Festival de Mérida y a Paco Azorín, director de la obra, porque han “edificado esta ópera inclusiva en la que participan colectivos de personas con alguna discapacidad”.

La secretaria general de Cultura ha subrayado que “el Festival de Mérida es un referente en el mundo escénico nacional e internacional, y ahora también es referente porque hace accesible e inclusivo el teatro a todos los públicos”.

García Cabezas también ha querido destacar la calidad del equipo artístico, encabezado por María José Montiel y Noah Stewart, y ha tenido palabras elogiosas hacia la Orquesta de Extremadura, que un año más está en la obra inaugural del Festival emeritense.

Por su parte, el director del certamen, Jesús Cimarro, ha señalado que esta edición arranca con un “espectáculo único”, que ha pretendido romper la imagen elitista de la ópera, creando una “ópera democrática y sin barreras” en la que personas “que normalmente no tienen presencia en el mundo de la cultura y tampoco acceso a ella, tengan un papel destacado en el Festival de Mérida”. A ellos y ellas ha querido agradecerles su participación y el trabajo realizado “para salvar sus dificultades y para darnos una gran lección de vida y de compromiso”.

Cimarro ha apuntado que ha sido un “proyecto ambicioso”, de complicada producción y coordinación por la envergadura del mismo, que hará que más de 400 personas entre músicos, coro, actores y figuración se suban al escenario.

El director del Festival de Mérida ha coincidido en destacar la calidad del reparto y del elenco artístico. A ellos se une la Orquesta de Extremadura y el Coro de Cámara de Extremadura que “contribuyen al brillo sonoro” de este espectáculo inaugural, que es una producción del Festival de Mérida y del Teatro de la Maestranza de Sevilla.

El director de la obra, Paco Azorín, se ha mostrado muy emocionado por acercar la ópera a todo el mundo. “Hemos puesto el listón muy alto” con 450 personas en el escenario con el elenco artístico y “los maravillosos colectivos de inclusión que han sido los auténticos protagonistas” de estos días de trabajo.

“Habéis sido un regalo para nosotros y sois el proyecto más bonito de mi vida”, ha dicho, dirigiéndose a los miembros de estos colectivos presentes en la rueda de prensa.

En cuanto a la obra, Azorín ha afirmado que ‘Sansón y Dalila’ es una historia que habla de odio, “del odio cronificado en el ser humano, que hace que pueblos enteros se aniquilen ya sin recordar por qué”. Con esta obra quiere “reflexionar sobre la necesidad de acabar con el odio de la única manera posible, que es el amor”.

La obra ‘Sansón y Dalila’ estará en cartel del Festival de Mérida los días 27, 29 y 30 de junio.