Olga García destaca los trabajos de conservación del cernícalo primilla desarrollados en los últimos años en las zepas urbanas

La consejera para la Transición Ecológica y Sostenibilidad, Olga García, ha participado hoy en la inauguración del VIII Congreso Internacional online sobre la conservación del cernícalo primilla, en el que se ha referido a los buenos resultados obtenidos en el proyecto ‘Life Zepa Urban’, financiado por la Unión Europea para la preservación de esta pequeña ave rapaz.

Según la consejera, “los cambios productivos de las últimas décadas del siglo pasado propiciaron un declive de la población de cernícalos primilla que, en la actualidad, se ha detenido gracias a numerosas iniciativas y planes de conservación”.

La población actual en Extremadura ronda las 1.600 parejas, aunque el cernícalo primilla continúa en situación vulnerable, como “sensible a la alteración de su hábitat” en el Catálogo extremeño de especies amenazadas.

Extremadura fue la primera región de la Unión Europea, a partir de 2003, en declarar Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) dentro de núcleos urbanos de pueblos y ciudades y este proceso de declaración de zepas urbanas ha continuado hasta consolidar una red repartida por todo el territorio extremeño. En 19 de ellas está presente el cernícalo.

El proyecto ‘Life, Gestión de ZEPA urbanas en Extremadura’ ha venido desarrollando desde 2016 un modelo de gestión en las zepas urbanas que asegura la conservación del cernícalo primilla a largo plazo y que sea aplicable a otras colonias urbanas.

“En estos años se han mejorado los lugares de nidificación en los edificios que acogen las colonias, muchos de ellos son bienes de interés cultural por lo que la colaboración con Patrimonio ha sido fundamental para elaborar un protocolo para realizar obras de restauración y mantenimiento en estos edificios, estableciendo las medidas y criterios necesarios para favorecer a la especie y evitar las molestias durante el periodo reproductor”, ha asegurado la responsable regional de Sostenibilidad.

Según Olga García, uno de los logros más relevantes de este proyecto ha sido la mayor sensibilización e implicación de la población local y de las administraciones públicas sobre los problemas de conservación del cernícalo, llevando a cabo diferentes actuaciones dirigidas principalmente a propietarios de edificios, empresas de construcción y escolares.

Desde la Junta de Extremadura también se está prestando apoyo y asesorando a los ayuntamientos para incluir en sus normas urbanísticas las medidas necesarias para la conservación del cernícalo primilla.

De forma añadida y gracias a los datos aportados por más de 80 ejemplares que han sido marcados con emisores GPS, se conoce ya en detalle el comportamiento de la especie y el uso del espacio, sus movimientos y las características de las áreas prioritarias de alimentación.

Por último, la consejera ha subrayado que “estamos convirtiendo al cernícalo primilla en un valioso recurso turístico, capaz de generar actividad socioeconómica sostenible a nivel local al mismo tiempo que contribuimos a su conservación”.